Nuestra cita con Lucía es en San Antolín de Bedón, una de las playas míticas para los amantes del surf, situada a unos 15 kilómetros de Llanes. En una finca silvestre, nos sorprenden cuatro casitas independientes con vistas al desierto y a sólo dos kilómetros del mar. “Me gustaría ser músico para fundir en un único canto, en un único himno, todas las voces y los pálpitos del universo”, afirmó una vez.